Por Daniel Tenenbaum
Esta parashá contiene varias de las partes más famosas de la Torá. El Shemá Israel, los 10 mandamientos y algunas frases que se usan
en los rezos, están acá.
Comienza con algo completamente inusual: ¡Moshé pidiendo algo a D’s para sí mismo! Le pide, le ruega que le permita entrar a la tierra prometida. Y esto le es negado de plano, incluso le prohíbe que vuelva a hablar del tema.
Luego continúa con un exhaustivo detalle de cómo el pueblo de Israel debe cumplir los mandamientos, no agregar ni sacar leyes, la grandeza y justicia de este sistema de vida que debería garantizar una sociedad justa, moral y próspera para todos. Para que no quede ningún resquicio nos insta a recordar la historia de nuestro pueblo y transmitirla a nuestros hijos.
Los 10 mandamientos aparecen 2 veces en la Torá, la primera, la cronológica a poco de salir de Egipto, y ahora, 40 años después, Moshé en su despedida antes de morir cuenta en sus palabras toda su historia. Es interesante ver que hay pequeñas diferencias en ambas, que exceden este comentario, que invitan al lector a profundizar en la belleza y riqueza de nuestro texto sagrado. Menciono una sola: en el mandamiento referido al shabat, aquí dice “shamor”, cuida el shabat, mientras que la otra versión dice “zajor”, recuerda el shabat. Además de muchas interpretaciones, de aquí el poeta rescató para el Lejá Dodí su comienzo: “zajor veshamor be dibur ejad”, o sea “recuerda y cuida en una sola expresión”, ya que el midrash interpreta que D’s dijo ambas palabras a la vez en los oídos del pueblo de Israel. Hay muchas mas perlitas como ésta…
El Shemá Israel es la principal declaración de fe del judaísmo. La tradición la coloca apenas al despertarnos y como última cosa antes de acostarnos, en las plegarias de la mañana y de la noche. Es una de las primeras oraciones que enseñamos a nuestros hijos, y con ella los mártires de todas las épocas enfrentan la muerte por Kidush Hashem. ¿Por qué? Porque resume todos los puntos centrales de nuestra fe: la existencia y unicidad de D’s, la libre y completa aceptación de Sus leyes, la transmisión a las nuevas generaciones. Todo esto de manera central y permanente y en todos los aspectos de la vida. No como algo abstracto sino aplicado y amado.
Entrando más en los detalles, vemos la amplitud y a la vez precisión: amar a D’s con todo tu corazón, tu mente y todo tu poder. En tu casa, al salir de ella. Y además de internamente, lo pondremos a la vista en las casas (mezuzá) y en nuestro cuerpo (tefilín).
Para terminar, la parashá amplía en varios frentes. Moshé prepara al pueblo de Israel para el inminente ingreso a la Tierra de Israel con palabras de aliento, pero sin minimizar el desafío. Deberán conquistar a los pueblos que la ocupan, destruir sus culturas paganas y afianzar la ley de Israel en todo el territorio. Y les advierte: van a recibir un hermoso país, rico y fértil, con arboles que otros plantaron y ciudades ya construidas… cuando eso pase, deberán tener la templanza y la humildad de recordar sus orígenes y la historia que los hizo llegar a esos logros.
Que tengamos la sabiduría de llenar nuestras vidas con estos principios.
(basado en las enseñanzas del rab. Mordejai Edery Z”L)