You say you want a revolution
Well, you know
We all want to change the world
En 1968, jóvenes alrededor del mundo se levantaron contra distintos gobiernos, a favor de distintas causas. La Primavera de Praga, el Mayo Francés, las protestas contra la Guerra de Vietnam y el Cordobazo en nuestras tierras un año después, pusieron a sociedades a luchar por sus derechos y cambiaron el status-quo.
En tiempos sin redes sociales ni internet, sucedió una coordinación impensada entre diferentes urbes del planeta tierra, con un mismo leitmotiv: el poder reside en la gente. Seamos realistas, pidamos lo imposible, decían las paredes de París.
La parashá de esta semana, nos cuenta de una revolución imposible miles de años atrás. Koraj, el primo de Moshé junto a 250 hombres hace frente y cuestiona el liderazgo de Moshé y Aarón, fallando estrepitosamente y ganando la ira de Dios.
Lo interesante, no es la crítica hacía el cuestionamiento de los liderazgos, sino la crítica hacia las formas. Koraj aprovechó un momento de debilidad de Moshé para plantear su revuelta y esto fue castigado.
El judaísmo promueve el diálogo y el disentir, sin embargo, en el caso de Koraj, su móvil no era el bien común, sino acrecentar su figura y seguir potenciando los personalismos. Él pensaba que era especial.
Las circunstancias en donde planteamos nuestras críticas son la respuesta al éxito o fracaso de los resultados.
Desde Majón Guesher, nuestra escuela de liderazgo en Bet-Hilel, promovemos el pensamiento crítico y la revolución juvenil, ¿Quienes más que ellos van a lograr los cambios permanentes en las sociedades del presente y del futuro?
Es este, el momento de apoyar a los nuevos movimientos que luchan por el clima, luchan contra los estereotipos de belleza o contra el maltrato animal liderados por jóvenes.
Los invito, a conocer e investigar las luchas actuales y a conocer sus objetivos y fundamentos, para poder colaborar y apoyar en los movimientos del Siglo XXI siempre con información y múltiples fuentes con atención hacía los liderazgos nocivos y con las vistas en el bien común.
Dylan Hersalis
Director de Majón Guesher